¿Quieres que tu despacho tenga la mejor imagen y se vea absolutamente increíble? No importa si es un despacho pequeño, ni siquiera si está en tu casa y es allí donde recibes a algunos clientes. Lo que de verdad importa es que se vea bien decorado y ofrezca una imagen profesional y muy atractiva.
Es importante señalar que no es lo mismo un despacho de un abogado que el despacho de alguien que realice trabajos de tipo creativo. Mientras que el primero suele desprender una imagen seria y con cierto aire clásico, el segundo tiene un margen mayor para improvisar y crear un lugar original. Pero cualquier despacho puede decorarse con una imagen moderna y atractiva que no por eso deje de resultar profesional y seria.
Comienza escogiendo el color de la pared. Debe de ser un tono que haga que la habitación se vea luminosa y bonita, pero que no destaque especialmente ya que la vista debe de ir en otras direcciones. Por eso, proponemos un tono perla, elegante y sofisticado, luminoso y a la vez cálido y que encaja con todos los estilos.
Para la ventana o ventanas, encarga estores personalizados con el nombre de tu negocio o con alguna referencia al tipo de actividad que realizas. Por ejemplo, si tienes un despacho como abogado puedes poner tu Web, que seguramente contenga tu nombre. Esto le dará un aire mucho más profesional al despacho.
El escritorio debe de tener un tamaño adecuado al espacio. Si vas a recibir a varios clientes a un tiempo, puede ser buena idea una mesa redonda en lugar de la mesa de trabajo tradicional. Así, podrás tener tu lugar para trabajar y espacio para recibir a más de un cliente a la vez y poder trabajar todos a la vez.
No olvides tener espacio para almacenamiento, que pueden ser estanterías, pero también armarios cerrados o muebles con cajones, según el tipo de material que quieras guardar. El tono y el estilo de los muebles irá en función de la imagen que quieras proyectar, pero cuida de que todo esté a juego.
Por último, la luz es muy importante, por lo que toda la estancia debe de estar iluminada de una forma homogénea y con suficiente intensidad, pero sin excesos que puedan hacer que los clientes se sientan incómodos o molestos. Puedes usar un punto de luz específico para tu zona de trabajo que refuerce la iluminación central.