Afrontamos esta primavera y verano con las expectativas muy altas en nuestro negocio de hostelería. Ya el verano pasado fue mucho mejor de lo esperado dadas las circunstancias y este debería ser aún mejor. Ya lo hemos notado en invierno, una época en la que nuestro restaurante, como el resto de negocios del pueblo, “hiberna” ante la falta de turistas. Pero esta temporada baja está siendo bastante mejor que las anteriores a la pandemia.
Y es que se nota que la gente quiere disfrutar y recuperar el tiempo perdido. Y a nosotros nos ha pillado, incluso, un poco desprevenidos, hasta el punto de que hemos tenido que revisar otra vez nuestra agenda de proveedores. Preferimos ser conservadores a la hora de hacer el pedido de materias primeras para no pillarnos los dedos, pero a última hora tuvimos que ponernos en contacto, por ejemplo, con el Proveedor de pota congelada para hacer un pedido extra porque nos quedábamos sin género.
Pero siempre que sea para pedir más, bienvenido sea. Y eso que hemos tenido que subir los precios, ya que a nosotros nos los han subido la mayoría de proveedores, por razones obvias. Crecen los costes del gasoil, del transporte, de los servicios, incluso de los salarios, y todo eso repercute en el precio final de un producto. Nos hemos tratado de resistir hasta que no hemos podido más porque si no se amenazaba considerablemente la rentabilidad.
Pero, para nuestra sorpresa, no hemos notado demasiada “resistencia” en los clientes que parecen aceptar que la realidad es la que es, y si se quiere salir a cenar, hay que pagar un poco más que antes. Nosotros, por nuestra parte, hemos estado renegociando precios, como con el Proveedor de pota congelada, de cara establecer un nuevo escenario en el que nadie salga demasiado perjudicado.
Nosotros entendemos también que los precios suban, pero a un ritmo aceptable para todos, también para nuestros clientes. Con todo, la temporada pinta bastante bien, a tenor de lo que estamos viendo en este final del invierno. Y esperamos cumplir expectativas para recuperarnos definitivamente.