¿Todavía no has aprendido a adaptarte a los espacios pequeños? Con el precio del alquiler subiendo como la espuma, a muchos inquilinos no nos queda otra que adaptarnos a las circunstancias. Y esas circunstancias son pagar cada vez más por menos. Pero como los sueldos no suben al mismo ritmo que los alquileres (y todos lo demás), tampoco podemos quedarnos a llorar en una esquina, eso en el supuesto de que tengamos una esquina desocupada en casa donde poder llorar…
La falta de espacio de los pisos pequeños se suele apreciar, sobre todo, en las cocinas. He visto pisos que ni siquiera tenían un espacio dedicado a la cocina, sino que los fogones y demás estaban tras la puerta de un armario. Pero a no ser que comas siempre fuera de casa o te guste la comida cruda, siempre vas a necesitar un espacio, aunque sea mínimo, para colocar utensilios y aparatos.
Por suerte, las compañías del sector también piensan en los pisos para liliputienses y fabrican mini electrodomesticos que pueden caber en espacios más reducidos. Porque en los tiempos que corren no nos imaginamos como puede ser la vida sin nevera.
Cada vez son más las personas que viven solas, los denominados ‘singles’. Y teniendo en cuenta la vida ajetreada que llevan muchos de ellos es verdad que tampoco precisan contar con una cocina equipada con frigorífico americano y doble horno. Pero sí que cocinan de vez en cuando. Para ellos son estos electrodomésticos tamaño reducido.
Por ejemplo, existen hornos con la mitad de tamaño del habitual. En ellos no se puede variar mucho la altura (a lo sumo dos posiciones), pero ofrece un servicio apreciable. Lo mismo se puede decir de otro aparato básico: la nevera. Las hay de todos los tamaños, pudiéndose adaptar a espacios súper reducidos.
Incluso existen mini electrodomesticos como lavavajillas. Para los que no soporten lavar los platos pero tengan una cocina mini, no desesperéis: también tenemos lavavajillas de poca capacidad pero suficiente para una o dos personas.
Eso sí, antes de comprar este tipo de aparatos, vigila los precios, porque a veces pueden ser más elevados de la cuenta.